Juegos Infantiles. Un verdadero Regalo de Navidad. Miguel Lawner.

                                                                






INAUGURACIÓN JUEGOS INFANTILES.

            El sábado 21 del presente, inauguramos finalmente los Juegos Infantiles diseñados por mí en 1973, mientras permanecía confinado en Isla Dawson. Esta ceremonia estuvo fijada para fines de octubre en el marco de la última Bienal de Arquitectura que tuvo lugar en un galpón del barrio Matadero. El estallido popular iniciado el 18 de octubre hizo imposible el término de las actividades programado por dicha Bienal, y solo ahora pudimos inaugurar los juegos infantiles ya mencionados.

            Mientras permanecí recluido en la Isla, el comandante del Campo me solicitó la realización de un proyecto destinado a construir una plaza de juegos infantiles en la localidad de Puerto Harris, donde residían las familias de los oficiales destacados en la base de la armada a cargo de la administración de la Isla. 


            Nosotros los presos, habíamos adquirido algún grado de reconocimiento, como consecuencia de los trabajos de rehabilitación efectuados en la Iglesia de Puerto Harris, que permanecía abandonada por más de 30 años. Gracias a nuestro trabajo, el templo logró recuperarse, al punto que el año 2009 fue declarado Monumento Nacional.

            Accedí a la petición del comandante y en el mismo cuaderno escolar que me había facilitado para efectuar el levantamiento de la Iglesia, diseñé un conjunto de juegos infantiles que titulé Un paseo por la Historia. No recuerdo las causas que me motivaron en ese sentido, pero proyecté un conjunto de juegos comenzando con un Palafito, propio de los tiempos primitivos. Continué con una Pirámide egipcia, el Partenón y un Laberinto griegos, representativos de la era del esclavismo. Más adelante propuse un Castillo Feudal, propio de la Edad Media. Continué con la chatarra de un locomóvil, que permanecía abandonado por la empresa que explotó la riqueza forestal de la Isla a comienzos del Siglo XX, como como representativo del desarrollo Industrial y concluí con un Sputnik, propio de la era Espacial.
           
                                                                                   Sputnik.

            Sin embargo, dichos juegos no se construyeron, porque el SIM (Servicio de Inteligencia Militar, le prohibió al comandante que los presos realizáramos trabajos en el caserío de Puerto Harris, bajo la excusa que nuestra relación con las familias residentes en el lugar, podía establecer una relación propicia para el envío o la recepción de mensajes con nuestros familiares.  Incluso argumentaron que podíamos hacer llegar mensajes secretos a la Unión Soviética.

            En definitiva, el proyecto de la Plaza de Juegos Infantiles permaneció registrado en el cuaderno escolar facilitado por el Comandante de la Base de la Armada en la Isla, y yo mismo, por causas que no me explico, nunca lo incorporé en las publicaciones sobre mis dibujos en prisión, publicados por primera vez en Dinamarca el año 1976 y más tarde en Chile el 2003 y una segunda edición el año pasado. 

            Este año, fui invitado por la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Chile, institución en la cual me formé y titulé, a dar una Charla Magistral, que titulé: Un Arquitecto en Prisión, porque estimé conveniente dar a conocer la facultad de los arquitectos para ejercer su oficio, aún  en las condiciones más adversas. 

            Incorporé en dicha Charla el proyecto para la Plaza de Juegos Infantiles en Isla Dawson. Era la primera vez que se daba a conocer públicamente, y produjo gran impacto. Días después, Juan Pablo Urrutia, Director del Departamento de Arquitectura de la FAU, me invitó a una reunión para informarme que la Facultad había acordado la construcción de los Juegos Infantiles como un aporte a la Bienal de Arquitectura, y que serían ejecutados por alrededor de 60 estudiantes de la Escuela, dedicados a dicha tarea durante todo el segundo semestre de este año.

            Así fue. Los visité en un par de ocasiones y quedé admirado por el entusiasmo puesto en su trabajo, entre otras cosas, porque se habían autoimpuesto la tarea de construirlos sin hacer uso de la tecnología moderna en la construcción, sino que con las herramientas que nosotros habríamos podido disponer 46 años atrás. Resultaba conmovedor, ver a muchachas esforzándose en cortar un polín de madera, haciendo uso solamente de un viejo serrucho.

 
                                                                   Pirámide 1

            Los juegos quedaron instalados a fines de octubre, en la sede de una Junta Vecinal del barrio Matadero, ubicada en Calle Placer esquina de Berta Fernández.  Allí tuvo lugar la inauguración oficial de los Juegos, en el marco de las actividades de fin de año programadas por dicha Junta de Vecinos.

            Nos reunimos al aire libre, junto a niños y vecinos del sector. Hicieron uso de la palabra Manuel Amaya, Decano de la Facultad de Arquitectura de la U. de Chile y Alberto Texido, en representación del Colegio de Arquitectos, quienes destacaron mi participación en la Reforma de los Planes de Estudios de 1946, que revolucionaron la enseñanza de la Arquitectura, así como mi contante preocupación por los aspectos sociales de nuestro ejercicio profesional. 

            En seguida habló Juan Pablo Urrutia, destacando los objetivos de relevar lo común y lo corriente en el objetivo de la última Bienal de Arquitectura y como la construcción de los Juegos Infantiles instalados en este barrio, coincidían con dichos objetivos. Por último, intervino Paula Sagrista, ayudante del profesor Patricio Arias, que condujo la construcción de los Juegos, quién trasmitió palabras elogiosas a mi ejercicio profesional en condiciones tan difíciles.

            En seguida, subió al escenario Cristián Olivares, dirigente de la Escuela Pública Comunitaria, construida en el sector por los mismos pobladores, quién hizo una reseña de mi obra y dio a conocer dos homenajes que recibí de parte de dicha organización vecinal: un dibujo realizado por el inmortal Mono González, vecino del sector y un retrato acompañado por un emotivo poema, escrito por el artista popular, Lucas Olivares. 

   

        



            También asistieron algunos de mis amigos como Camilo Salvo, el único presente de los compañeros con los cuales compartí el confinamiento en la Isla Dawson, los colegas Ana Sugrañez, Alfredo Rodríguez, Igor Rosenmann, Mónica Bustos y Sonja Friedmann.
            En resumen, se trató de una actividad llena de cariño y calor humano, con los niños encaramándose en los juegos, siendo la pirámide el más atractivo, en la versión mejorada que diseñaron los estudiantes.
           
Miguel Lawner                                                                           24.12.2019.

 


                                       Pirámide 2




                                                           Pirámide 3


                                                    Palafito     
                                               




Partenón.
 

Mural de Ingreso a la Plaza de Juegos.






Levantando el dibujo del Mono González. 

Por último, les adjunto un recirte del Diario La Estrella de Castro (Chiloè), informando que tras mi reciente paso por la Isla, la Asociaciòn de Carpintwros ha decidido apoyar la construcción de los Juegos en coordinación con el Centro Cultural CECREA.


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